Unas Navidades diferentes y un nuevo año cargado de optimismo

En un año complejo y marcado por la pandemia, regalar intangibles se ha convertido en el mejor presente que podemos hacernos estas Navidades. Amor, tiempo, sonrisas e ilusión, pequeños gestos que engrandecen nuestro día a día y que en ocasiones relegamos a un segundo plano, cautivados por esa felicidad efímera de lo material. Mientras hacemos balance de este 2020, damos la bienvenida a un nuevo año cargado de ilusión y esperanza, en el que deberemos seguir trabajando para afrontar los retos del futuro y lograr hacer de este, un mundo mejor. Avancemos, pero no olvidemos. Que la solidaridad emanada durante los últimos meses logre anteponerse al individualismo y nos arrope gracias al calor de las redes vecinales y familiares, que han demostrado ser motor de nuestra sociedad. Aprendamos a reducir las distancias; a decir las cosas con la mirada, a sonreír con los ojos y a abrazar con palabras. Comprometámonos con los más vulnerables, reduzcamos la brecha de la desigualdad y hagamos por que la actual coyuntura no conlleve a una merma de aquellos derechos inherentes a cualquier ser humano. La resiliencia que juntos hemos demostrado tener, esa capacidad de superación frente a la adversidad debe alentarnos a seguir mirando hacia delante, pese a los escollos del camino.

Dotemos de valor a la palabra, y veamos en la comunicación la herramienta mediante la que estrechar lazos, devolver certidumbre y hacer llegar nuestro mensaje. Desde Convencer con Comunicación seguiremos trabajando por conseguir que este espacio sea una ventana a la información de calidad, veraz y de actualidad, un pequeño rincón a la reflexión, mediante el que contribuir a una sociedad informada.